Deriva Extrait de Parfum

Tiziana Terenzi Deriva Extrait de Parfum Unisex

La palabra deriva, en el mundo de la navegación marítima, hace referencia al movimiento de una embarcación sin rumbo, moviéndose a merced de las olas y la corriente.

Un movimiento incontrolado en el que perdemos el control de nuestra voluntad, sin un rumbo preciso, flotando hacia un destino desconocido.

Un viaje a veces relajado como en los días soleados, en ausencia de viento y en calma chicha, o a veces impetuoso y cargado de adrenalina, en medio de la furia de la tormenta y de las olas, abandonados, casi gratamente rendidos, a merced de los acontecimientos externos; ambos son las caras de la misma moneda seductora que inspira al navegante y al explorador a abandonar la orilla alejándose del puerto confiando en sus conocimientos, para embarcarse en un viaje dirigiéndose hacia el abandono y el asombro, a través de aventuras y desafíos desconocidos.

Las zonas seguras de nuestro conocimiento dan paso al descubrimiento del misterio que nos intimida y atrae al mismo tiempo.

Imaginemos que nos encontramos a bordo de nuestro querido Telea en medio del mar, en el profundo azul, tan lejos de la tierra firme que ya no podemos vislumbrar los confines de la costa.

A simple vista nada se revela a nuestro alrededor.

Estamos solos en medio del océano cuando, de repente, el viento se detiene por completo y todo a nuestro alrededor adquiere una calma irreal.

Hemos entrado en un estado de calma chica y ya no es posible gobernar nuestro barco. Ya no oímos el crujido de los aparejos que contrarrestan la impetuosidad del viento ni el chapoteo del casco al penetrar en las olas.

Todo enmudece y adquiere una nueva dimensión, no hay músculo ni pensamiento que pueda contrarrestar esta candidez.

Flotamos lentamente a la deriva, dejando que la vida impregne nuestras almas.

A veces hay que saber entregarse a la vida para poder vivirla plenamente, como ocurre cuando vamos a la deriva en el mar y nos adentramos en lo desconocido.

La lasciva entrega a la fluctuación de los acontecimientos queda capturada en este perfume llamado Deriva, el emblema de perderse por completo en la candidez de nuestras pasiones más secretas e inconfesables.

La creación se abre con un acorde funambulesco y misterioso, donde las notas aromáticas abrazan a las notas hespérides.

Aquí aparecen los ecos de los nobles cítricos como la Bergamota de la región de Calabria y el Limón de Sorrento, combinados con el contrapunto de la Lavanda de Bulgaria y el Cardamomo de Zanzíbar, endulzados por la persuasión azucarada de la Piña de Brasil.

Esta nota de cabeza fluctuante se rinde ante un corazón seductor y excitante, donde las reverberaciones de flores como el Geranio de Egipto y la Gardenia de Italia se mezclan silenciosamente con las notas aromáticas de la Pimienta rosa de Perú, acentuada a continuación por el espíritu rebelde del Pachulí de Singapur y la dulzura ácida de la Frambuesa rusa.

Toda la creación queda sostenida en una base sólida, donde los pilares aromáticos especiados encuentran la fuerza en las notas finales de las hojas de Tabaco de Virginia, mezclados con los robustos ecos de dulzura afrodisíaca de las vainas de Vainilla de Madagascar y del Haba Tonka de Colombia, acentuados por las reverberaciones de las maderas nobles como el Sándalo australiano y la madera de Palo rosa italiano.

Deriva encierra en una gota de exquisito perfume todo el espíritu de entregarse en el torbellino de las propias pasiones y emociones, sin miedo alguno ni remordimientos a perderse en la total renuncia, porque a veces dejarse llevar sin oponer resistencia es la única manera de descubrir la gran belleza de la vida, la esencia de la existencia.